Respecto al incidente de congestión de botes en el Área Turística de Tam Coc (Provincia de Ninh Binh) el 19 de julio durante una fuerte tormenta eléctrica, el Departamento de Turismo provincial informó el 20 de julio que, inmediatamente después del incidente, ordenó al comité de gestión realizar operaciones de rescate, garantizando que todos los pasajeros y botes regresaran sanos y salvos al muelle sin reportarse heridos.
Según el Departamento de Turismo de Ninh Binh, el comité de gestión movilizó tres lanchas motoras para rescatar a aproximadamente 90 pasajeros. Sin embargo, debido a los 3 km de distancia entre los botes varados y el muelle, se requirieron múltiples viajes. El equipo de rescate priorizó a turistas mayores, niños y visitantes internacionales, lo que generó frustración en algunos pasajeros rescatados después. Este fue el primer incidente en el Área Turística de Tam Coc causado por condiciones climáticas inesperadas.
Anteriormente, algunas fuentes en línea reportaron que un grupo de turistas quedó varado por fuertes lluvias y vientos durante su visita al Área Turística de Tam Coc. El Departamento de Turismo de Ninh Binh aclaró que las afirmaciones sobre turistas atrapados en un paseo en bote la tarde del 19 de julio eran inexactas. Para esa noche, todos los turistas habían regresado sanos y salvos al muelle.
Hasta la mañana del 20 de julio, las actividades turísticas se reanudaron con normalidad. En preparación para el Tifón Wipha (Tormenta No. 3), el Departamento de Turismo de Ninh Binh emitió directivas instando a los sitios turísticos a implementar medidas oportunas y efectivas contra tormentas e inundaciones, priorizando la seguridad de los visitantes y evitando la complacencia. Durante clima severo, los tours deben suspenderse inmediatamente, con notificaciones oportunas a turistas, agencias de viajes y autoridades.
Las instalaciones deben desplegar personal y equipos de rescate en puntos clave, publicar números de emergencia, instalar señales de advertencia suficientes, capacitar al personal en respuesta a emergencias y coordinar estrechamente con las autoridades.
Hoteles, restaurantes y otros proveedores de servicios deben monitorear las condiciones climáticas y desarrollar planes adecuados de respuesta a tormentas.
Las instalaciones deben inspeccionar y reforzar infraestructura para garantizar la seguridad de visitantes y empleados, almacenar suministros esenciales y disponer de personal 24/7 durante la tormenta. También deben proporcionar actualizaciones climáticas, pautas de seguridad, números de contacto de emergencia y coordinar con autoridades locales si ocurren incidentes.