Arabia Saudita está avanzando rápidamente en una transformación económica estructural para adaptarse a los cambios globales, construir una economía diversificada y crear un entorno empresarial favorable para inversores y emprendedores, con el objetivo final de establecer el Reino como un centro global para el comercio y los negocios.
En este contexto, el Centro Nacional de Competitividad trabaja en estrecha colaboración con las agencias gubernamentales para implementar continuamente diversas reformas destinadas a abordar los desafíos que enfrentan tanto los sectores públicos como privados.
Para superar los obstáculos que afectan el desarrollo y la mejora del entorno empresarial del Reino, el centro ha emprendido 14 tareas, que incluyen supervisar a las agencias gubernamentales en la implementación de medidas de reforma necesarias para mejorar la competitividad, establecer asociaciones sólidas con organizaciones internacionales de competitividad y aprender de las experiencias de países líderes en indicadores globales de competitividad.
Las estadísticas oficiales muestran que estas medidas de reforma han impactado positivamente en el desarrollo económico, con un PIB creciendo un 1,3%, la actividad empresarial aumentando un 6,4% y un total de 1,6 millones de documentos de registro empresarial emitidos.
El Reino de Arabia Saudita continúa progresando en la mejora de su competitividad global, con especial énfasis en atraer emprendedores a sectores de desarrollo prioritarios y emergentes, especialmente después de permitir el 100% de propiedad extranjera.