El 29 de septiembre de 2025, el índice bursátil europeo Stoxx 600 subió un 0,3%, impulsado por las ganancias en los sectores sanitario y tecnológico. Los datos de agosto y la segunda quincena de septiembre mostraron una mejora de las cifras del PMI y que los nuevos pedidos volvían a crecer tras más de un año de estancamiento.

Aunque la actividad de producción industrial en los países de la zona euro disminuyó más de lo previsto en junio de 2025 y la confianza del mercado se vio afectada por diversos riesgos externos, los indicadores publicados en agosto y septiembre revelaron señales positivas. Esto sugiere que la región podría estar entrando en una fase de recuperación, aunque los desafíos persisten.

Los datos publicados el 14 de agosto mostraron que la producción industrial de la zona euro cayó bruscamente en junio, alcanzando su nivel más bajo desde mediados de 2024. Sin embargo, el PIB del segundo trimestre aún creció aproximadamente un 0,3%, lo que refleja cierta resiliencia de la economía en medio de la volatilidad.

El 3 de septiembre, el PMI Compuesto HCOB de la zona euro -una medida integral de la actividad manufacturera y de servicios- subió a 51,0 puntos en agosto, cruzando el umbral de los 50 puntos. Cabe destacar que los nuevos pedidos volvieron a crecer por primera vez desde mayo de 2024, lo que indica una mejora de la demanda del mercado.

El 16 de septiembre, los datos mostraron que la producción de julio aumentó ligeramente en comparación con junio. Esto señala que el sector manufacturero comienza a recuperarse tras un período de fuerte decline, aunque el ritmo sigue siendo lento. Para el 23 de septiembre, la encuesta más reciente reflejó un panorama mixto: el sector servicios sigue siendo el principal motor, mientras que la industria manufacturera no ha mostrado una recuperación clara.

En los mercados financieros, la negociación del 29 de septiembre vio al índice bursátil europeo Stoxx 600 subir un 0,3%. Las acciones sanitarias y tecnológicas lideraron las ganancias. La farmacéutica GlaxoSmithKline (GSK) subió un 2,9% tras conocerse la noticia del relevo del CEO. La compañía farmacéutica UCB alcanzó máximos históricos debido a los resultados positivos de un fármaco para tratar una enfermedad de la piel.

La empresa farmacéutica AstraZeneca también atrajo la atención al anunciar que cambiaría la negociación de ADR por una cotización directa en la NYSE, manteniendo su sede central y su cotización bursátil en Londres.

El anuncio de la decisión de AstraZeneca desató el debate sobre el futuro del mercado financiero de Londres. Muchas opiniones sugieren que este movimiento pretende aprovechar los profundos mercados de capitales en EE.UU., al tiempo que plantea dudas sobre la capacidad de Londres para mantener el atractivo a largo plazo para las grandes empresas europeas.

En cuanto a la política, la inflación de la zona euro en agosto se mantuvo cerca del 2%, próximo al objetivo del Banco Central Europeo. Este desarrollo llevó a los mercados a predecir que el BCE mantendría una postura cautelosa tras los anteriores recortes de tipos de interés.

A largo plazo, las oportunidades de inversión en infraestructuras se consideran uno de los motores importantes. El 2 de junio se anunciaron planes para modernizar el sistema de red eléctrica, que se estima requerirá 788.400 millones de dólares para las redes de distribución y 515.200 millones de dólares para la transmisión desde ahora hasta 2040. Un informe complementario del 9 de junio siguió confirmando esta enorme necesidad de capital, abriendo nuevas direcciones para los sectores energético y de infraestructuras de Europa.

La región de Europa Oriental-Central también mostró una clara diferenciación. Polonia se beneficia de los fondos de apoyo de la UE, ayudando a mantener el impulso de crecimiento mientras las exportaciones enfrentan dificultades. Por el contrario, en la República Checa, los planes de gasto a gran escala previos a las elecciones han suscitado preocupaciones sobre la sostenibilidad presupuestaria.

Además, los mercados europeos del 29 de septiembre siguieron muy de cerca la evolución en EE.UU. Las negociaciones presupuestarias entre la administración y el Congreso no habían llegado a un consenso, aumentando el riesgo de un cierre temporal del gobierno.

En este escenario, muchas agencias federales se verían obligadas a cerrar. Informes económicos importantes, como los de empleo, inflación y datos comerciales, podrían retrasarse o posponerse, afectando la evaluación de los inversores sobre la situación global.

Los mercados bursátiles europeos cerraron el 29 de septiembre en territorio positivo, ya que las ganancias en valores sanitarios y de lujo compensaron los descensos en los valores bancarios y energéticos.

Los mercados bursátiles estadounidenses terminaron la semana con una nota positiva, con los principales índices estableciendo todos nuevos récords tras los recortes de tipos de interés de la Reserva Federal.

Los esfuerzos se han centrado en implementar soluciones para cumplir con los criterios de mejora de FTSE Russell. «Hemos llevado a cabo reformas y decisiones contundentes con la emisión simultánea de muchos mecanismos y políticas que surten efecto inmediato para crear las condiciones más favorables para el capital de inversión extranjera».