Se sospecha que el hombre robó un teléfono móvil (valorado en aproximadamente 50.000 yenes) a su expareja en una calle del barrio de Shiroishi, Sapporo, alrededor de las 8:00 de la mañana.
Según la policía, el hombre esperó en emboscada frente a la residencia de la mujer antes de cometer el acto. Durante el interrogatorio, admitió los cargos, declarando que lo robó como garantía por dinero que quería que le devolvieran.
La mujer no resultó herida.
