Muchos asumen que los nervios comprimidos son un problema de personas mayores. Sin embargo, este problema afecta cada vez más a jóvenes, incluso adolescentes. ¿Qué está causando el aumento de casos de nervios pinzados en grupos de menor edad?

¿Qué es un nervio pinzado?

Un nervio pinzado ocurre cuando un nervio es comprimido por tejidos blandos circundantes, como discos inflamados, ligamentos o músculos hinchados.

«Esta compresión puede causar dolor en la zona afectada. Aunque puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, los nervios pinzados son más comunes en la columna vertebral, el cuello o la muñeca», explicó la fuente.

¿Quién puede sufrir un nervio pinzado?

Cualquier persona puede desarrollar un nervio pinzado, pero quienes tienen 25 años o más son más propensos debido a largas horas sentados en el trabajo.

La mala postura y los hábitos no ergonómicos hacen que este grupo sea más vulnerable. Sin embargo, los casos en adolescentes también están aumentando, especialmente en la columna lumbar (parte baja de la espalda), causando dolor lumbar.

Una investigación de Frontiers in Surgery registró un aumento de al menos 6.8% en casos de nervios pinzados en menores de 21 años.

Causas de nervios pinzados en adolescentes

Un nervio pinzado ocurre cuando tejidos blandos o huesos circundantes comprimen un nervio. Factores contribuyentes en adolescentes incluyen:

● Obesidad

● Mala postura al sentarse

● Permanecer sentado por mucho tiempo

● Uso excesivo de dispositivos

● Exceso de ejercicio

● Traumatismos o accidentes

● Antecedentes familiares

«Los nervios pinzados en adolescentes antes se consideraban raros, pero los hábitos modernos—encorvarse, inactividad, masa muscular débil—están impulsando el aumento.»

Síntomas de un nervio pinzado en adolescentes

Los síntomas son similares en todas las edades y varían según la zona afectada. Señales de alerta incluyen:

● Hormigueo

● Dolor irradiado

● Sensación de ardor

● Dolor agudo, como descargas eléctricas

● Entumecimiento

● Debilidad en las extremidades

«Los primeros signos pueden incluir dolor de espalda, pero si persiste más de dos semanas, se debe buscar atención médica para localizar la compresión.»

Consecuencias de no tratar un nervio pinzado

Los casos leves suelen mejorar con tratamientos conservadores como fisioterapia, estiramientos y reposo. Sin embargo, ignorarlo puede llevar a:

● Entumecimiento o parálisis en extremidades

● Pérdida de control de esfínteres

● Pérdida de sensibilidad genital

Tratamiento de nervios pinzados en adolescentes

Los casos leves pueden no requerir tratamiento especializado, pero es esencial monitorearlos. Los graves pueden necesitar cirugía, especialmente si los métodos conservadores fallan.

La cirugía mínimamente invasiva, como BESS (Cirugía Endoscópica Biportal de Columna), es preferible por una recuperación más rápida y menores riesgos—crucial para adolescentes en crecimiento. Este método usa dos pequeñas incisiones (0.5–0.8 cm) para alta precisión.

Ventajas del método BESS

BESS supera a la endoscopia estándar al permitir mayor movilidad de los instrumentos quirúrgicos. Otras ventajas incluyen:

● Cicatrices más pequeñas

● Menor daño tisular

● Recuperación más rápida

● Menor dolor postoperatorio

● Retorno más rápido a actividades diarias

● Menor riesgo de complicaciones e infecciones

Elegir el tratamiento adecuado depende de la gravedad de los síntomas y el grado de compresión nerviosa. «Consulte a un especialista para explorar opciones según la condición de su hijo.»