El régimen militar en Guinea-Bisáu anunció el martes por la noche la liberación de 6 opositores políticos que estaban detenidos desde el golpe de Estado que derrocó al presidente Umaro Sissoco Embaló el 26 de noviembre del año pasado.
Los líderes golpistas describieron el gesto como una «muestra de buena voluntad», en un momento en que aumenta la presión regional e internacional para que el país retorne al orden constitucional.
El liderazgo militar también declaró en un comunicado que la liberación de los detenidos representa un «compromiso con el retorno al orden constitucional y el respeto a los derechos internacionales».
Este paso se produjo tras la visita de una delegación senegalesa de alto nivel a Bissau, que se reunió con los detenidos y exigió su liberación.
Además, un grupo amenazó la semana pasada con imponer «sanciones selectivas» a cualquier parte que obstaculice el retorno al gobierno civil.

Un País Cargado con un Legado de Golpes de Estado
Guinea-Bisáu, que ha experimentado una serie de golpes de Estado desde su independencia, vive una nueva fase de transición después de que el depuesto presidente Embaló abandonara el país.
El liderazgo militar designó al general Horta Intam, un estrecho colaborador de Embaló, para encabezar un período de transición de un año, en medio de un escepticismo generalizado sobre el futuro del proceso político.
En contraste, el candidato opositor Fernando Dias buscó refugio en una embajada que le concedió asilo, mientras que Pereira y varios líderes opositores permanecen detenidos.