A partir de este año académico, las escuelas rusas implementarán un nuevo estándar GOST para los uniformes escolares, desarrollado por Rosstandart. Según las autoridades rusas, esto ayudará a eliminar las diferencias sociales entre niños de familias con distintos niveles de ingresos. Sin embargo, muchos padres están actualmente consternados por los uniformes «estandarizados».
El nuevo GOST introduce criterios más estrictos para evaluar la calidad de las telas y define una lista de artículos esenciales incluidos en el conjunto del uniforme escolar. El documento enfatiza que las regulaciones no restringen la libertad de diseño y permiten elementos de identidad escolar, como logotipos, parches y detalles decorativos.
Los fabricantes que comercialicen productos como uniformes escolares deberán cumplir con las nuevas regulaciones. Esto facilitará el control de calidad y reducirá el riesgo de productos falsificados.
Según el GOST, los componentes principales del uniforme escolar incluyen blusas, chaquetas, blazers, cárdigans, jerséis, suéteres, cuellos altos, camisas, vestidos tipo pichi, faldas, pantalones, shorts, así como overoles o semi-overoles.
Diseños anticuados
Las pautas sugieren que los uniformes deben ser cómodos y atractivos para los estudiantes. Se recomienda evitar colores brillantes y optar por materiales naturales: algodón y lino para otoño y primavera, lana y cachemir para invierno.
Recientemente, se mostró un ejemplo de uniforme conforme al GOST, pero los padres en redes sociales ya han ridiculizado el diseño.
«Es humillante para las niñas. Parece ropa de anciana», decía un comentario.
Muchos usuarios también cuestionaron si los uniformes serán gratuitos o requerirán compras costosas.
«¿Copiaron esto de los trajes de los políticos? Los niños parecerán que van a sesiones parlamentarias. Menos mal que mi hijo mayor estudia en casa—quizás saque al menor también (aunque no solo por el uniforme)», escribió otro usuario.
«Qué gracioso que eligieran directamente uniformes de camarero y sirvienta», comentaron otros.
Estimaciones anteriores sugerían que preparar a un niño para la escuela en 2025 costaría a los padres alrededor de 13.000 rublos.
El precio de la ropa y el calzado varía según el género y el tipo de compra. Un traje y zapatos nuevos para un niño cuestan aproximadamente 3.300 rublos, mientras que un conjunto similar para niñas es ligeramente más caro: 3.800 rublos.
La ropa deportiva también difiere en precio: el equipo nuevo para niños cuesta alrededor de 3.100 rublos, mientras que el de niñas es un poco más barato, 2.700 rublos.
Otro gasto importante son las mochilas y los útiles escolares, con artículos nuevos costando a los padres aproximadamente 6.500 rublos.
La compra más costosa sigue siendo el espacio de estudio del niño, con un escritorio y silla nuevos que promedian alrededor de 18.000 rublos.
