Un equipo de investigación ha demostrado con éxito un nuevo método para almacenar energía solar que podría aumentar significativamente la eficiencia y reducir costes. La tecnología, desarrollada tras años de experimentación, utiliza materiales avanzados para capturar y retener energía solar durante periodos prolongados.

Las pruebas iniciales muestran que el sistema puede operar con un índice de eficiencia que antes se consideraba inalcanzable para aplicaciones a escala comercial. Este avance se ve como un paso crucial hacia redes energéticas más sostenibles e independientes en todo el mundo.

Los expertos de la industria destacan el potencial de esta innovación para acelerar la transición global hacia la eliminación de los combustibles fósiles. Se necesitan más pruebas a gran escala para confirmar el rendimiento y la durabilidad a largo plazo.