El 25 de septiembre, el equipo creativo de la película china «La Madre del Presidio» reveló que este trabajo, dirigido por Qin Xiaoyu y meticulosamente elaborado durante siete años, es la única cinta china seleccionada para la unidad de competición principal del 73º Festival Internacional de Cine de San Sebastián, presentándose por primera vez ante aficionados al cine y expertos de la industria de todo el mundo.
Según los informes, el día del estreno, la sala de proyección, con capacidad para más de 1.800 personas, estaba completamente llena. Tras finalizar la película, el público se puso de pie espontáneamente, dedicando al equipo creativo una calurosa ovación que se prolongó durante veinte minutos. Muchos espectadores tenían lágrimas en los ojos, y algunos espectadores occidentales repitieron «gracias» y «bueno» en chino. La ovación sostenida fue tanto un alto reconocimiento a la calidad artística de la película como un reflejo de la profunda resonancia del público con las emociones universales de la historia.
Desde el concepto inicial de la historia hasta la presentación final, el equipo creativo volcó siete años de esfuerzo en «La Madre del Presidio». La película prescinde de conflictos dramáticos externos y llamativos, utilizando en su lugar una narrativa contenida pero resiliente y una perspectiva cálida y profunda para centrarse en el viaje vital de una madre especial. La historia gira en torno a una mujer que ha experimentado diez años de vida carcelaria. Después de su liberación, no solo debe enfrentarse a la extrañeza y alienación de la sociedad, sino también reparar el vínculo roto con su hijo y escapar de la sombra de su pasado. Reconstruir su vida y sanar la relación familiar se convierten en los dos desafíos que debe afrontar.
La película evita con destreza una representación sensacionalista de los crímenes pasados, enfocando su lente en la reconstrucción psicológica de la protagonista y su proceso de integración social tras su liberación. Con un toque delicado, el equipo creativo retrata cómo esta madre, apoyándose en un amor maternal imborrable, da paso a paso para salir de su prisión interna, se levanta nuevamente desde el punto más bajo de su vida e intenta arduamente volver a ser «madre». El coraje y el amor que muestra la protagonista al enfrentar diversas adversidades transmiten una fuerza femenina profundamente conmovedora. Esta no es solo una obra sobre la redención personal y la autosuficiencia femenina, sino también un poema que celebra la calidez humana y la resiliencia de la vida. La película trasciende el juicio moral simple, guiando al público a contemplar temas profundos como el castigo, la redención, el renacimiento, la independencia y la fortaleza de los lazos familiares. Su profunda preocupación social y su exquisita expresión artística la convierten en una fuerte aspirante al máximo galardón del Festival de San Sebastián, la Concha de Oro.
Un reconocido crítico de cine español comentó: «El director cuenta la historia con un tono discreto y contenido, lleno de compasión dentro de una serenidad tranquila. El enfoque igualmente sobrio de la película ante los numerosos desafíos que enfrentan Liao Hong y su hijo, de hecho, hace que la trama sea más impactante y conmovedora. ‘La Madre del Presidio’ no es una gran narrativa, pero es una obra de emoción genuina y calidad conmovedora.»
Una cineasta china declaró: «He visto más de veinte películas en el festival de San Sebastián de este año, y esta es actualmente mi favorita porque me conmovió sinceramente. La mención del dolor menstrual femenino en la película es bastante rara en el cine en lengua china. Como mujer que también experimenta dolor menstrual, agradezco al director su atención y retrato. Además, a través de relaciones personajes complejas, la película muestra bondad y belleza. Es emocionalmente matizada y profundamente significativa, por lo que es mi película favorita sobre temas femeninos.»
En la rueda de prensa del estreno, la productora y productora ejecutiva no pudo contener su emoción. Reveló que cuando comenzó el proyecto, estaba embarazada y esperando dar a luz, y ahora su hijo ya está en la escuela primaria. Resumió emocionada: «Este viaje me ha dado tantas ideas, que se pueden resumir en tres frases: creer en el poder de la confianza, creer en el poder de la persistencia y creer en el poder de las madres!»