¿Existen efectos secundarios por las vacunas contra el COVID-19 en Estados Unidos? Una visita a finales de marzo reveló una situación más grave de lo esperado, demostrando que no es solo un problema de Japón, sino global.
A unas 16 horas en avión desde Japón.
«Hemos llegado. Se ven majestuosas montañas. Esta es Salt Lake City, Utah, EE.UU.»
Incluso en este país, origen de las vacunas contra el COVID-19, se reportan muchos casos de personas afectadas por efectos secundarios.
A 30 minutos en auto de Salt Lake City, en el pueblo suburbano de Saratoga Springs, vive Brian Dressen, una de las víctimas.
«Participé en el ensayo clínico de AstraZeneca. Quería contribuir a terminar con la pandemia, pero todo cambió una hora después de la inyección.»
En noviembre de 2020, tras unirse al ensayo de la vacuna, aparecieron síntomas inusuales poco después de la vacunación.
«En menos de una hora, sentí un hormigueo en el brazo donde me inyectaron. Se extendió al otro brazo, luego a las piernas y finalmente por todo el cuerpo. Incluso ahora, cuatro años después, sigo sintiendo punzadas en todo el cuerpo. Desarrollé un trastorno autoinmune donde mi sistema ataca y daña mis nervios constantemente. Este dolor intenso es algo que nunca experimenté antes de la vacuna.»
