
Hyderabad, Si no hay tiempo para la introspección, no habrá oportunidad de alcanzar la salvación. Es una verdad simple que la salvación requiere renuncia, riqueza, caridad y tiempo. Para obtener el billete a la salvación, uno debe dedicar tiempo, caridad, cuerpo y mente. Estos pensamientos fueron expresados durante una asamblea religiosa organizada por el Shri Jain Shravak Sangh Kora en el Shri Anand Jain Bhavan Kora en Sikh Cantonment, donde la reverenciada Rajmatishriji M.Sa. Rajul Adi Thana 3 habló.
Según un comunicado de prensa, la oradora declaró que escuchar Jinvani (enseñanzas divinas) con una mente pura lleva al desprendimiento del karma. El alma alcanza la salvación rápidamente. Para lograr la salvación, uno debe escuchar Jinvani. La salvación no se puede alcanzar sentado en casa. Sin la compañía de santos, la salvación es inalcanzable. Escuchar las palabras del Señor conduce al destino de la salvación. Para alcanzarla, uno debe soportar la austeridad física. M.Sa. enfatizó que antes de involucrarse en la práctica espiritual, primero hay que convertirse en un buscador.
Hoy, la gente no tiene tiempo para la contemplación espiritual, pero sí para fiestas y celebraciones. Decide a dónde quieres ir. La vida humana, el entorno noble, el buen linaje y el tiempo son bendiciones, al igual que la oportunidad de escuchar Jinvani, así que evita la negligencia y la pereza. M.Sa. dijo que ganar riqueza no es malo, pero su uso adecuado es esencial. Entre los siete placeres de la vida, el confort corporal viene primero, seguido por la alegría de la riqueza.

El uso adecuado de la riqueza y la importancia del hambre en la vida
Si el cuerpo está sano, todo se siente bien. Acumular riqueza también es necesario. Con riqueza, todo es posible: se mantiene la juventud, mientras que sin ella llega la vejez. El deseo no es inherentemente malo, pero el conocimiento de cómo usar la riqueza sabiamente es crucial. Hoy, todo requiere dinero, pero debe gastarse según la necesidad. Lo primero esencial para el cuerpo es la comida, que se obtiene con dinero. Si no hubiera hambre, nadie extendería sus manos ante otros. El hambre trae sufrimiento: la vida gira en torno a ella.
Uno debe ganar dinero para satisfacer el hambre. M.Sa. dijo que el hambre afecta el estómago, y no se pueden realizar prácticas espirituales con el estómago vacío. Cuando el cuerpo está nutrido, uno está listo para la penitencia.